Bueno, aquí está. Los aficionados a este mundillo ya lo habréis idolatrado bastante, y no sin razón. Ya está a la venta el Volkswagen Scirocco, el modelo que la empresa dejó de fabricar en 1992 y ahora vuelve como creado por la divinidad, convertido en un muy bonito deportivo que, paradójicamente, pese a la sorpresa del morro y el desplazamiento del logo al capó, parece muy sencillo.

Todo este esfuerzo forma parte quizá de la línea que sigue la empresa: el Golf ha conseguido ser una marca por sí solo, también el Polo y el Passat. Volkswagen quiere que la vuelta del modelo Scirocco no sea por lo bajini, sino irrumpiendo con una imagen diferente pero necesariamente personal. Quiere también volver hacer de él una marca, para que esta vez el Scirocco venga para quedarse mucho tiempo.
El esfuerzo, además, ha sido doble, no sólo de márketing. El coche tira. Mucho. La prueba son 2000 centímetros cúbicos que bombean diésel o gasolina a una potencia de hasta 200 caballos de potencia, escalonados en una caja de cambios de 6 velocidades, o también lo es el control de aparcamiento, el navegador de crucero, los sensores de lluvia graduales, la tapicería de cuero de serie, los asientos delanteros y traseros calefactables. Es verdad que podía parecer verdad la falta de deportividad en los modelos de Volkswagen. Podía.

Volkswagen Scirocco. Ficha técnica:
Motor: Motores de hasta 2.0 de cilindrada y 200 CV de potencia.
Principales características: Caja de cambios de 6 velocidades, manual o automática, control de aparcamiento y de velocidad de crucero, sensores de lluvia graduales, tapicería de cuero, asientos calefactables, etc.
Velocidad y aceleración: Velocidad máxima: 233 km/h; De 0-100: 7,1 seg.
Consumo medio: 7,6 L / 100 km.
Dimensiones: Largo: 4256 mm; Ancho: 1810 mm; Alto: 1404 mm.
Precio: A partir de 22.910.