
Y es que casi toda la opinión coincide al mirarlo: esto, parecen decir las críticas, sí es un Mégane. Con un aire que al menos en Hechos para rodar nos recuerda un poco, respecto a la forma general del coche, al Seat León, el nuevo Mégane puede tener satisfechos a los responsables de Renault: novedoso, auténtico, con personalidad, con un precio comercial muy competitivo y que continua enarbolando, más que nunca, dos banderas que en Renault han llegado a ser sello de la casa: seguridad y confort.

Y, por si fuera poco, otro refuerzo más radica en lo que hacíamos referencia antes: este modelo de Mégane es bonito, alegra a la vista, que es por donde primero entra un nuevo coche. No parece, y ésa es su gran virtud ante los anteriores, que el público se vaya a cansar enseguida de unas formas novedosas, de una línea delantera que equilibra perfectamente personalidad con suavidad de formas, que como dijimos en el Ford Ka y como ocurre en el Fiesta (y como será un recurso típico en los automóviles de aquí a adelante) muscula sus líneas laterales enérgicamente hacia arriba en diagonal para darle continuidad a las líneas estilísticas delanteras. Todo acabando muy decentemente, esta vez sí, en una trasera que ofrece más estética, que hace aparentar al coche como una unidad única y con personalidad, y que por ende esconde una mucho mayor capacidad de maletero. Toda una atracción. La única pega: dejará a la altura del betún a sus predecesores.

Nuevo Renault Mégane. Ficha técnica:
Motor: Motor de hasta 1998 cm. cúbicos, 4 cilindros y 180 CV.
Principales características: Caja de cambios BVM de hasta 6 velocidades, tracción delantera, frenos de disco con ABS, gran capacidad de maletero (1162 dm.).
Velocidad y aceleración: Velocidad máxima: 255 km/h; De 0-100: 7,8 seg.
Consumo medio: 7,6 L / 100km (según versión).
Dimensiones: Largo: 4295 mm; Ancho: 2037 mm; Alto: 1471 mm.
Precio: Desde 14.400.
No hay comentarios:
Publicar un comentario